La tensión entre el Gobierno nacional y el sindicalismo está en ascenso. A horas de la masiva movilización de la Multisectorial 21F al Obelisco, dos jefes gremiales cegetistas anticiparon un clima de "mayor conflictividad" por el rechazo de los trabajadores a la política económica de Cambiemos.

El triunviro de la CGT Juan Carlos Schmid anunció que "se vienen meses de mayor conflictividad laboral", ante la intención del Poder Ejecutivo de impulsar una reforma laboral, la suba de tarifas, el acuerdo con el FMI y el techo a las paritarias. "Se vienen meses con más conflicto", inisitió el líder del sindicato de Dragado y Balizamiento, que justamente este jueves cumple un paro de actividades en todos los puertos del país contra un veto de Mauricio Macri a la ley de marina mercante y comercial.

Para Schmid, la central debe convocar a una huelga general antes del inicio del Mundial de Rusia. "Hay que instrumentar una medida lo más rápido posible, pero hay que discutirlo y trabajarlo al interior de la CGT. Soy de los que piensan que hay que activar una protesta general lo más rápido posible", afirmó. Según versiones, en Azopardo 802 se baraja la primera o segunda semana de junio y suenan fuerte el martes 12 o miércoles 13, horas antes que la pelota empiece a correr.

En declaraciones a FM La Patriada, el portuario reclamó la reapertura de las paritarias que cerraron en torno al 15% o menos. "Nadie se va a quedar con el porcentaje que cerró y esto va a traer más conflictividad laboral", indicó.

Schmid no marchará este viernes al Obelisco junto a Camioneros, las CTA, la CFT, los movimientos sociales y las diversas agrupaciones políticas opositoras. "Habrá una delegación de la CGT, yo no voy a participar, tengo diferencias con muchos de los compañeros que estarán allí, que en lugar de sumar han cuestionado sin hacer ninguna diferencia sobre el conjunto del triunvirato, pero no estoy alejado a rechazo a un acuerdo con el FMI", explicó.

Otro jefe gremial que se expresó a favor de una medida contundente de la CGT para frenar el ajuste fue el secretario general de UPCN, Andrés Rodríguez. "Es probable que el movimiento sindical tenga que plantear un plan de lucha", lanzó el dirigente estatal en diálogo con El Tribuno de Jujuy. "La queja permanente de la gente es que no le alcanza para llegar a fin de mes", agregó.

En medio de la paritaria para más de 200.000 trabajadores del Estado, Rodríguez no descartó la posibilidad de un paro general, aunque sostuvo que la CGT tiene "la responsabilidad de no intentar tirar de la cuerda para que la cuerda se parta".

"Indudablemente nos da la sensación desde el campo sindical que se aproximan tiempos de confrontación. El trabajador está siendo realmente muy castigado, lo vemos todos los días en las grandes ciudades, en el conurbano bonaerense y en todos lados la queja permanente de la gente es que no le alcanza para llegar a fin de mes. Hay morosidad por ejemplo en las expensas de departamentos, hay morosidad en los pagos de algunas tarifas", señaló.

El gremialista advirtió que "es probable que el movimiento sindical tenga que plantear un plan de lucha para por lo menos intentar, en lo posible, salvaguardar a quienes representa".

"Si bien es cierto que nosotros respetamos la gobernabilidad y protegemos la institucionalidad, lo que es clave, también tiene que ver una tensión hacia la realidad social que vive la gente. Nos parece que esto es un faltante grave del Gobierno nacional", dijo.

"Apelamos a que siempre haya una instancia de solución por la vía del diálogo, lo que sería mucho más provechoso. Pero si no hay respuestas indudablemente las salidas tendrán que ser otras", remarcó.

UPCN comenzó a negociar la semana pasada un aumento salarial. A través del ministro de Modernización, Andrés Ibarra, el Gobierno ofreció 12% sin cláusula de revisión ni gatillo más un incremento al plus por presentismo y otro nuevo por productividad. El 12% se corresponde con el plan de ajuste que Nicolás Dujovne solicitó a los ministros y tiene como referencia el acuerdo que UPCN y ATE suscribieron en la Legislatura porteña. Fuentes sindicales revelaron a este medio que el piso es 15%.

Autoconvocados por el paro

Apremiados por las pesquisas judiciales, los Moyano apuraron el armado de un frente político gremial bautizado Movimiento 21 -homónimo de la revista de Hugo Quintana- y de una línea interna más combativa en la CGT para pelear la conducción en agosto próximo. El despliegue de los camioneros se respalda en la masiva convocatoria a la marcha del 21 de febrero pasado en la 9 de Julio y San Juan. Este 25 de mayo buscan repetir a la altura de Corrientes.

En este marco, Pablo Moyano se postuló junto al bancario  Sergio Palazzo para liderar la central en remplazo del triunvirato y en oposición a la posible candidatura del dialoguista Héctor Daer. En busca de adhesiones de todo el país, esta semana Moyano reunió a las regionales bonaerenses de la CGT en la seccional de Lomas de Zamora de Sanidad, el gremio de Daer. Fue una clásica "mojada de ojera".

En la casa de Daer confluyeron los caciques de Florencio Varela, La Matanza, Lomas, San Martín y San Pedro-Baradero, entre otras. Emitieron un duro documento contra el Gobierno. En el mundo sindical, se interpreta como una "avanzada" del moyanismo sobre el triunvirato para que convoque al paro general. El próximo martes se autoconvocarán regionales del interior para exigir una huelga a la cúpula de la CGT.