Tomás Dameno Santillán, el chico de 9 años desaparecido en la localidad bonaerense de Lincoln, fue hallado muerto en un campo a 10 km del casco urbano. Las sospechas de los investigadores habían recaído sobre la ex pareja de la madre del chico, Adalberto Ramón Cuello, quien fue demorado y anoche estaba detenido en Junín.

 

El campo en el que encontraron el cadáver del niño pertenece a familiares de Cuello. El nene presentaba un fuerte golpe en la cabeza, que le habría causado la muerte. Los peritos aseguraron que el cuerpo presenta hematomas en la cara.

 

El chico había sido visto por última vez minutos después de las 12 del martes, luego de salir de la escuela. En ese momento vestía remera verde, zapatillas verdes de lona, jeans gris, guardapolvo escolar blanco y mochila roja.

 

Antes de hallarse el cuerpo, las fuentes ya apuntaban a la ex pareja de la mamá de Tomás. En horas de la tarde, los policías habían realizado un operativo policial en su casa. "La mamá sospechaba de su ex pareja", declaró la inspectora de la escuela de Tomás. En el mismo sentido se expresó el tío del niño. Según algunos testigos, Cuello había quedado irritado tras la separación de la mamá de Tomás y habría expresado que quería lastimarla.

Cuello tiene 38 años de edad. Según testigos, la relación entre Cuello y el menor era muy mala. Trascendió que el sospechoso le habría enviado un mensaje de texto a su ex mujer en el que la amenazaba: "Te voy a pegar por donde más te duele".

 

Los perros entrenados para los operativos llevaron a los investigadores hacia la vivienda de Cuello y direccionó la investigación. La casa de Cuello, donde se hizo el allanamiento en horas de la tarde, está ubicada a unas 20 cuadras del lugar donde el niño fue visto por última vez luego de salir de la escuela.

 

Pero pocas horas después del allanamiento apareció el cadáver de Tomás en el campo, ubicado a 10 km del pueblo y a 50 metros de la ruta Nº 50. Según los primeros trascendidos, el chico fue asesinado mediante un fuerte golpe con un objeto duro en la cabeza, probablemente un palo. Fuentes judiciales informaron que el sospechoso, una vez detenido, fue retirado de la comisaría local a bordo de un patrullero rumbo a Junín, mientras decenas de vecinos se reunían en el lugar.

 

La desaparición del chico generó gran conmoción en la pequeña ciudad del noroeste bonaerense, ubicada a 315 km de Capital Federal. El intendente de Lincoln, Jorge Fernández, había instado a la comunidad a aportar datos para encontrar al nene. El jueves a la noche la comunidad de Lincoln había realizado una marcha por la aparición con vida del chico.

 

Anoche la gente de la ciudad de Lincoln se concentró en las calles de manera espontánea, para expresar la bronca y el dolor frente esta muerte.