El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, señaló que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, "hace kirchnerismo explícito" con su apoyo a Milagro Sala y acusó al Frente para la Victoria (FpV) de "levantar la bandera de que hay presos políticos" para impedir que la Justicia avance en investigaciones que podrían escalar hasta comprometer a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Además, consideró que la Cancillería argentina "tiene dudas" sobre el caso Sala, y opinó que eso "no ayuda a refutar las críticas internacionales".

Las palabras de Morales llegaron luego de que Almagro dirigiera una carta a la Argentina con copia a la dirigente de la organización Tupac Amaru, Milagro Sala, que se encuentra detenida en el penal Alto comedero de Jujuy por los presuntos delitos de asociación ilícita, malversación de fondos públicos para la construcción de viviendas, enriquecimiento ilícito y tentativa de homicidio, entre otros.

En esa carta, el Secretario General de la OEA reclamó su inmediata liberación, un pedido similar al que hizo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

"Almagro hace kirchnerismo explícito, termina participando de la vida política interna de un país miembro, y es muy lamentable que eso ocurra", sostuvo Morales en una entrevista con Télam desde Jujuy, horas después de recibir el apoyo de su partido, congregado con ese fin en la capital provincial.

Morales afirmó -sin embargo- que si hubiera una resolución de la CIDH pidiendo su liberación el país debería cumplirla, pero consideró que hasta el momento se trató de "opiniones que terminan favoreciendo el clima de impunidad que quiere el kirchnerismo".

También apuntó contra el pedido del FpV en el Congreso, que reclamó la intervención a los tres poderes de la provincia por el caso Sala. "Eso dejó al descubierto su verdadera intención: Levantar la bandera de que hay presos políticos descalifica cualquier acción de la justicia que eventualmente pudiera ir sobre la responsabilidad de Cristina Kirchner", consideró el Gobernador jujeño, que lamentó que Sala no "ejerza su derecho de defensa" refutando las acusaciones en su contra, y en lugar de eso apele a la figura de presa política.

Para Morales el fin último es "desacreditar el funcionamiento de la justicia en un tema tan sensible para los argentinos como la corrupción y todo lo que le robaron al pueblo, entonces el verdadero debate está en si los ladrones van a ir presos o no".

- ¿Hubo errores judiciales en el caso Sala?

- La justicia actuó bien. Ella no está presa por un acampe sino por robarse 29 millones de pesos, y la gente vio el video de cómo su gente se llevaba los bolsos con plata del banco. Eso fue la semana antes de que yo asumiera, pero en todo el año habían sacado 350 millones de pesos de la misma manera. Estamos hablando de que los allanamientos en la casa de Sala se encontraron 30 bolsos y una máquina de contar billetes. El tema me parece tan burdo que el hecho de que el FpV pida la intervención para frenar esa investigación es algo gravísimo para el país.

- ¿Se arrepiente de algo después de las críticas que recibió por el caso?

- Para mí Sala es la punta del iceberg de una matriz sistémica de corrupción nacional de la que formaban parte ella, José López, Lázaro Báez y la propia Cristina Kirchner. No me arrepiento de haber restablecido el cumplimiento de ley y de dar garantías de derechos a todas las personas que terminaron en la peor de la esclavitud: el clientelismo violento.

- ¿A la cancillería le faltó aclarar el tema ante los organismos internacionales?

- La cancillería tiene dudas. Y eso no ayuda. Jujuy ya informó todo lo que tenía que informar. Ahora todos deberían leer las causas completas y hablar con los jueces, sobre todo los organismos internacionales.

- Cumple un año de gobierno, ¿Qué fue lo mejor y lo peor?

- Lo peor fue la violencia que encontré, todo lo que se robaron y la desarticulación del Estado que dejaron. Lo mejor fue que encontré muchos trabajadores con compromiso para acompañar el cambio.

- En la calle la gente se queja de que la plata no alcanza.

- Fue un año difícil, pero tratamos de mantener la trama social de las organizaciones y lo hicimos en un 90%. Nuestro desafío fue la paz y la unión, y dimos un paso importante. Ahora necesitamos más trabajo, nos va a llevar tiempo. Nuestra prioridad es fortalecer la producción y los pequeños emprendedores.

- ¿Y cómo califica el primer año de Macri?

- Fue bueno, se tomaron medidas saludables, aunque algunas fueron duras, pero el año próximo tiene que ser mejor. Nosotros sentimos mucho el acompañamiento del Gobierno. Trabajamos juntos.