Luego de tomar declaración por más de tres horas a Leonardo Fariña, el estudiante de Economía y operador financiero asumido como "valijero" de dinero de la corrupción que se blanqueaba en la cueva financiera "La Rosadita", tras cual surgió la versión de que habría pedido acogerse a la figura de la ley del arrepentido, el juez federal Sebastián Casanello resolvió cerrar la causa con secreto de sumario.

Poco antes de conocerse la decisión de Casanello de volver a cerrar la causa con secreto de sumario, trascendió que Fariña le habría pedido acogerse a la figura del "Arrepentido" para  aportar datos de los mentores y responsables de la denominada "ruta del dinero K", a cambio de obtener una reducción de condena.

Fuentes judiciales informaron que Fariña cumplió con el compromiso de "contar todo como lo había hecho en el programa de PPT, de Jorge Lanata frente a las cámaras ocultas". Insistió en que él era colaborador de Lázaro Báez para llevar decenas de millones de dólares en bolsos de dinero a la financiera conocida como La Rosadita, desde donde eran "fugados" a paraísos fiscales donde tras ser blanqueados volvían al país a través de la compra de acciones del propio Estado.

El testimonio de Fariña complicó más a Lázaro Báez y su contador, Daniel Pérez Gadín, quien fue acusado por el ex titular de SGI, Federico Elaskar, de de haberlo amenazado para le entregara la financiera para poder actuar con mayor libertad y fluidez en la fuga de dinero.

Cabe recordar que Casanello había ordenado el secreto de sumario el 28 de marzo pasado y lo levantó el jueves; pero un día después volvió a cerrar la causa por las revelaciones que hizo Fariña.