La presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, manifestó su satisfacción por la aprobación de la ley que transfiere al Estado nacional la Universidad de esa institución, que arrastra una deuda superior a los 200 millones de pesos de sueldos y demandas, y consideró "enemigos del pueblo" a los diputados opositores que rechazaron la iniciativa.

"Para mí son enemigos, no opositores. Del enemigo yo no quiero hablar. Quiero hablar de la oposición real, no del enemigo que me ensucia todo el tiempo no aceptando esto", dijo la dirigente de derechos humanos.

Hebe aclaró que el traspaso de la Universidad de las Madres no implica "ninguna carga" para el Estado nacional, al tiempo que consideró "un orgullo" que de ahora en adelante la Universidad sea plenamente pública y tenga garantizado presupuesto para funcionar.

"Con la universidad no va ninguna carga. Lo único que van a pagar es los sueldos, como en cualquier universidad. En este tiempo algunos profesores se fueron, pero la mayoría nos entendió. Hay profesores que hacía dos años que no cobraban e igual estaban con nosotros", agregó Bonafini.

La líder de las Madres dijo que los legisladores opositores que rechazaron la estatización deben  "estar tranquilos", porque se encargarán de saldar las deudas que dejó el desfalco de la fundación Sueños Compartidos y los hermanos Schoklender. "Hemos pagado más de 300 millones ya", puntualizó, para precisar: "no voy a dejar nada que ensucie a mis hijos. Estamos pagando por nuestros hijos, no por los que nos critican. Porque algunos pelotudos que no averiguan nada nos dijeron terroristas y ahora nos dicen chorras".

Vale señalar que tras más de cuatro horas de debate, la estatización de la Universidad de las Madres fue aprobada por 132 votos a favor, 87 en contra y 5 abstenciones que correspondieron a Alcira Argumedo (Proyecto Sur), Facundo Moyano (Cultura, Educación y Trabajo) y los tres diputados de Unidad Popular Víctor De Gennaro, Claudio Lozano y Antonio Riestra.