La incorporación de las formaciones permitió mayor frecuencia en el servicio junto con  novedades tecnológicas en materia de seguridad y confort, entre las que se cuentan frenos ABS, sistema inteligente de cerrado de puertas -que impide que el tren se ponga en marcha si todas no están herméticamente cerradas-,  y sistema de frenado automático.

Además, poseen un sistema antiacaballamiento que no permite que, en caso de accidente, los vagones se monten uno encima del otro.