Así lo revelan las conclusiones de las más de 130 asambleas distritales que realizaron los docentes convocados por la Federación de Educadores Bonarenses (FEB) en el marco de un plan de protestas realizadas a principios de este mes.

El informe de la FEB sostiene que tras revisar los más de 130 informes realizados en esas asambleas docentes se demuestra que en el 85% de las reuniones, los educadores dejaron sentada su preocupación por "las reiteradas y crecientes situaciones de violencia de padres, alumnos hacia los trabajadores". Este planteo quedó en segundo lugar, después de los pedidos vinculados con las cuestiones salariales, que estuvieron en el 98% de las reuniones convocadas por los delegados de la FEB.

"La violencia en los lugares de trabajo es una problemática que venimos denunciando desde hace años. Incluso tuvimos que conformar un equipo de asesoramiento legal dentro del gremio para asistir a los trabajadores. Pero las autoridades han minimizado esta problemática que ahora se extendió a toda la provincia", explicó Mirta Petrocini, presidente de la FEB.

La dirigente advirtió que "indefectiblemente este creciente malestar derivará en una determinación gremial porque es reiterada, generalizada en todos los distritos y creciente. Las asambleas distritales muestran claramente un clima de disconformidad que determinara la necesidad de protestas. La FEB podría disponer alguna medida concreta para que este reclamo sea escuchado", dijo Petrocini.

Con el material enviado por los docentes de toda la provincia, las autoridades de la FEB clasificaron los reclamos y planteos en varias categorías. Una de ellas, es la "situación salarial" que incluye: pérdida de la capacidad adquisitiva del sueldo; regularización del pago de haberes a docentes; normalización de las liquidaciones irregulares y regularización del pago de asignaciones familiares. Estas situaciones irregulares se repitieron en casi la totalidad de las asambleas.

Como se dijo, otra categoría que tuvo altísima frecuencia en los reclamos docentes es la encuadrada dentro de "violencia laboral". Allí se enumeraron episodios registrados en distintos establecimientos que incluyen agresiones, denuncias o acusaciones por parte de integrantes de la comunidad educativa; falta de respuesta del sistema; incertidumbre por denuncias infundadas; falta de apoyo de los niveles superiores; falta de contención o protección para alumnos y docentes; inexistencia de respaldo jurídico oficial para docentes; pedidos de conformación de gabinetes pedagógicos reiteración de todo tipo de agresiones. "Resulta urgente abordar en serio y con soluciones esta problemática. Necesitamos una normativa clara e instrumentos para poder actuar con eficacia ante la presencia de estos episodios", planteó Petrocini.

"Por primera vez, esta situación que calificamos como hostigamiento laboral llega al tope de los reclamos de los docentes, apenas debajo de los pedidos vinculados con la cuestión salarial. Es un fenómeno que crece en toda la provincia, que afecta la labor diaria de los educadores y que impacta de lleno en la calidad educativa", explicó Mirta Petrocini, presidente de la FEB. "Además, los maestros advierten que no se sienten respaldados por el sistema educativo. Al contrario, en muchos casos, los niveles jerárquicos arrojan un manto de sospecha sobre el docente, en lugar de analizar con objetividad cada caso para determinar si se trata de acusaciones infundadas. Vemos con preocupación el creciente número de casos de agresiones contra trabajadores de la educación que luego no son protegidos por el sistema", agregó.

El otro factor preocupante que se refleja en las conclusiones de las asambleas realizadas en la primera semana de octubre tiene que ver con la situación de la obra social IOMA: entre las quejas recogidas en las asambleas se destacan: Médicos que cobran montos en negro o por encima de los bonos; trabas burocráticas y demoras en los trámites; falta de medicamentos en las farmacias adheridas; reclamos por descuentos múltiples (por cada cargo); falta cobertura en prácticas básicas; inconvenientes en la devolución de los reintegros; especialidades que dejan de atender y ciudades donde los laboratorios no atienden. Las quejas por el mal funcionamiento de IOMA figuran en el 65% de los informes elevados por las asambleas.

También, casi la mitad de los encuentros con delegados reflejó protestas por falencias e irregularidades en el funcionamiento de las Prestatarias encargadas de las licencias. Los maestros describen que estas entidades Desconocen licencias; desconocen certificados médicos presentados; no respetan horarios de atención sobre todo en localidades del interior; falta conformación de juntas médicas, entre otras deficiencias.

"Es un malestar intenso, profundo y generalizado porque cada reclamo, cada falencia atenta contra la tarea, la salud y el salario de los docentes y por consiguiente con la calidad inclusiva de la educación pública", aseguro Petrocini.

El viernes, la FEB realizará un congreso de Delegados del que participaran más de 200 representantes de toda la provincia.
A.R.