Pareció broma, pero no lo es: ayer a la tarde, en plena hora pico, cinco ladrones saltaron del techo del micro en el que eran trasladados a la Cárcel de Ezeiza, en plena Autopista Riccheri - a la altura del Peaje de Tapiales -, cayendo uno por uno sobre el asfalto ante la mirada de los automovilistas. Uno murió por los golpes tras el salto, otro fue recapturado, herido, y los tres restantes lograron escapar.

En pleno tránsito, desde una unidad de traslado de detenidos del Servicio Penitenciario Federal (SPF), los presos comenzaron a saltar desde el techo. En el colectivo viajaban 34 detenidos, que por norma deberían ir esposados, y cuatro agentes penitenciarios, en el compartimiento delantero de la unidad. Eran el chofer y tres guardiacárceles. Ahora están siendo investigados para saber si tuvieron responsabilidad en la fuga.

Según relataron fuentes policiales a Clarín, el traslado era de rutina y los presos habían sido llevados por la mañana a diferentes tribunales de la Ciudad de Buenos Aires. Regresaban a sus unidades en Ezeiza, destaca el portal de noticias lamatanza.clarin.com.

La huída comenzó apenas el colectivo pasó el peaje ubicado a la altura del Mercado Central. "No se tiraron cuando el micro se paró en el peaje, porque allí hay policías. Esperaron que arrancara para trepar al techo y empezar a saltar", indicó una fuente de la investigación. Es por eso que piensan que no fue una fuga improvisada.

Diez metros adelante del peaje se tiraron los primeros dos. Treinta metros más adelante, dos más. Y ya unos 120 metros después, cuando la camioneta había tomado velocidad, el restante. Los automovilistas tocaban bocina para alertar a los guardias e intentaban esquivarlos. Luego, comenzaron a llamar al 911. Uno de los presos que se escapó estaba condenado por secuestro y robo con armas.

Minutos después se hicieron presente en el lugar varios patrulleros de las comisarías del Partido. La principal hipótesis gira en torno a que fue una fuga preparada y que la claraboya del techo del micro estaba rota desde antes del momento de la fuga.

El preso recapturado, con heridas por los golpes, fue llevado al Hospital Paroissien.