27-04-2024
02-01-2013 | Balance de 2012
Afirman que la caída de las cosechas fue lo más saliente de 2012

Lo dijo Néstor Niell, vicepresidente 1° de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Con respecto a la presente campaña afirmó "no es la cosecha gloriosa que todos esperaban".

"Del balance de 2012 queda que la importante pérdida de cosecha fue algo negativo. Especialmente lo que se refiere a cosecha gruesa, maíz y la soja", sostuvo Néstor Niell, vicepresidente 1° de la Bolsa de Cereales y presidente de INTAGRO ante "Siempre que llovió…, paró", por Radio Colonia.

"Se sintió más fuerte en la soja y el maíz. En el caso de la soja cuesta mucho, y esto implicó una cosecha de cuarenta y pico de millones de toneladas contra los cincuenta y pico que se podía esperar", indicó el especialista y agregó "así hubo que reducir las exportaciones y una molienda que tuvo que bajarse a la luz de la poca existencia.

Luego, dijo "desde el punto de vista productivo no fue un año feliz. Tuvimos un año con una sequía importante que mejoró a comienzos del 2012, pero terminó muy mal el 2011. Esto fue de alguna manera compensado con un comportamiento de valores mundiales muy atractivos e interesantes que una parte de los productos lo tomaron y otros lo hicieron tardíamente. O sea, la soja lo tomó desde su comienzo. Ahí hay mucha competencia entre exportación e industria. Es más, a veces hubo comportamiento de una demanda que a pesar de caídas externas acá no caía en función de una fuerte demanda y de las restricciones de productores que no vendían porque se habían quedado sin soja o porque no tenían mejores alternativas que quedarse con la soja en sus instalaciones".

En cuanto a maíz, "la primera parte del semestre del año no tomó estos valores porque todavía seguía la vieja política de manejo de Roes y exportación que significaba márgenes para los compradores de US$ 40/50 por tonelada. El segundo semestre del año se modificó el sistema de Roes y tuvo una mejoría. Se agilizó la cantidad de Roes a otorgar a distintos exportadores y liberalizó el sistema. Así empezó a reaccionar de los US$ 140/150. Diría que fueron buenos valores, algunos tomados por el productor argentino y otros tomados tardíamente, y una cosecha muy pobre".

"Obviamente, esto significó que hubo zonas con pérdidas más o menos importantes y que los capitales de trabajo se resintieran. Con lo cual había una enorme preocupación por, en primer lugar, cómo se enfrenta a la nueva siembra, y segundo, tratar de no tener en la nueva siembra otro episodio así porque dos años seguidos con problemas de pérdidas de rendimiento hace que muchas zonas tengan problemas serios, no solo del productor sino también de los proveedores de plata e insumos", indicó Niell.

Con respecto a la presente campaña, Niell sostuvo "parecería con un pronóstico mejor que la 11/12, pero no es la cosecha gloriosa que todos esperaban para emparchar y sanar las heridas y cicatrices de esa campaña. En maíz es sin duda un área menor que la anterior, pero con siembras que van avanzando con cierto atraso (15% para el maíz y la soja). En el maíz la experiencia ha hecho que sembrar tardíamente no tenga demasiada implicancia en materia de rindes, pero en soja sabemos que día que pasa son 100 o 200 kilos menos de rindes".

"Con lo cual, este atraso del 15% en soja hace pensar que conseguir los 55 millones de toneladas que se está estimando va a ser una tarea titánica", concluyó.