26-04-2024
24-03-2011 | En Monteros, Tucumán
Multitudinario homenaje a Isauro y Arturo Arancibia primeros docentes asesinados el 24 de marzo de 1976
Con la presencia de más de 1.500 personas de diferentes puntos de Tucumán y de diferentes provincias se llevó adelante ayer en la escuela José Federico Moreno, el primer Homenaje Nacional a Isauro y Arturo Arancibia, dirigentes docentes que fueron asesinados un 24 de marzo de 1976, por la última dictadura militar.
Para este reconocimiento estuvieron presentes el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, el gobernador de la Provincia, José Alperovich, el secretario general de la CTA Hugo Yasky, la secretaria general de CTERA, Stella Maldonado, el secretario general de la Asociación de Prensa de Tucumán, Oscar Gijena, la hermana menor de los dirigentes, Italia Arancibia, el intendente municipal, Alberto Olea, el vicegobernador interino, Regino Amado, la ministra de Educación, Silvia Rojkés de Temkim y dirigentes de la CTA y CTERA de las provincias de Jujuy, Salta, Catamarca.

En sus discursos los funcionarios nacionales, provinciales y dirigentes sindicales reconocieron la trayectoria, el espíritu, el honor como persona y como dirigente ejemplar para los tucumanos y argentinos, que significó Isauro Arancibia.

La ministra de Educación, Silvia Rojkés de Temkim señaló que el homenaje se trataba de un acto emotivo y político, porque los hermanos Arancibia representan a los 30 mil desaparecidos del país, que luchaban por una educación para todos. "Y digo que es política este encuentro porque son las decisiones políticas las que nos llevaban a decir si tenemos más o menos presupuesto en educación. Los argentinos nos merecemos y trabajar por una educación que sea obligatoria y universal para que nadie se lleve nuestros derechos. Por esa línea estamos trabajando con cada uno de los docentes del país", dijo en su reconocimiento.

En tanto, la secretaria general de la CTERA, Stella Maldonado, expresó que se sentía orgullosa de tener el privilegio de inaugurar la paritaria nacional docente que se venia luchando hace muchos años. "En esta paritaria esta la huella de compañeros como Isauro Arancibia. Nosotros recogimos lo que se sembró en esos momentos. Estamos conmovidos porque se realiza por primera vez un acto de reconocimiento nacional", remarcó.

El cierre estuvo a cargo del titular de la CTA, Hugo Yasky, quien manifestó que "yo vengo aquí a decirle que Isauro es un ejemplo de lucha que el nos puso de pie y nos enseño que los trabajadores de la educación no tenemos destino, sino vamos unidos a la clase trabajadora".

Isauro Arancibia

Nació en Montero, provincia de Tucumán, el 25 de marzo de 1926. Maestro rural desde muy joven, llegó a dirigir la Agremiación de Trabajadores de la Educación Provincial (ATEP), y desde allí impulsó la unidad de todos los gremios, principalmente con la FOTIA de Atilio Santillán. Fue protagonista del proceso que llevaría a la fundación de CTERA, de la que fue su Secretario General Adjunto.

prescindible darle un impulso renovador, tranformador y creador. La Escuela Pública Argentina tuvo en él un defensor inclaudicable que luchó contra la injusticia y el privilegio. Y los docentes, un ejemplo permanente de coraje y consecuencia en la organización de los trabajadores. 

Isauro sabía que lo consideraban "peligroso" y había sido amenazado por la Triple A.
"Francisco Isauro Arancibia ya te advertimos una vez lobo disfrazado de oveja, están sentenciado a muerte: serás ejecutado como todos los extremistas. Te damos la última oportunidad: debes desaparecer antes del 1 de marzo cuando terminemos en Córdoba se inicia la etapa final en Tucumán. 'Adiós guerrillero' A.A.A.".

Francisco Isauro y Arturo René Arancibia, su hermano, fueron asesinados el 24 de marzo de 1976 por personal civil y policial en el local de la Agremiación de Educadores de la Provincia (A.T.E.P.) donde residían. on dos escopetas de caza, resistieron y dieron muerte a uno de los asesinos, cayendo ellos después. El cuerpo de Isauro Arancibia tenía más de cien balazos.

Fue maestro y, como tal, una expresión cabal de reciedumbre moral, de aguda percepción del tiempo que nos toca vivir, de coraje cívico, de una inquebrantable voluntad para luchar y de una gran sensibilidad para comprender los problemas sociales. 

En su homenaje, una decena de escuelas argentinas llevan su nombre, al igual que el auditorio de la Central de los Trabajadores Argentinos y diversas agrupaciones sindicales docentes. El documental "Maestros del viento" relata su vida, al igual que el libro "La oruga sobre el pizarón", del escritor tucumano Eduardo Rosenzvaig.