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18-08-2025 | Coeficiente de Reproducción sobre Ingresos en Argentina | |||
Concebir y criar un hijo en la Argentina de Milei es un lujo seg煤n informe de la Fundaci贸n Encuentro | |||
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Se habla mucho de la ca铆da de la tasa de natalidad y la responsabilidad de las mujeres y los j贸venes en este declive. el Coeficiente de Reproducci贸n e Ingresos en Argentina (CRIA) de la Fundaci贸n Encuentro evidencia la enorme dificultad que implica hoy querer tener un hijo en nuestro pa铆s. En el primer trimestre de 2025, criar a un beb茅 de menos de un a帽o represent贸 el 57,6 % del ingreso medio de las mujeres y el 40,8 % del ingreso medio de los varones.
El numerador covar铆a con la Canasta de Crianza, que se compone en casi un 70% por el salario horario de las trabajadoras de casa particular. Informe completo El Coeficiente de Reproducci贸n e Ingresos en Argentina (CRIA) es un indicador que relaciona el costo mensual de la canasta de crianza para un/a beb茅 de 0 a 1 a帽o con el ingreso medio de las personas que tienen ingresos en el pa铆s. Su objetivo es ofrecer un umbral econ贸mico de referencia para estimar cu谩nto representa en t茅rminos relativos el esfuerzo de sostener la vida en sus primeros meses, seg煤n el nivel de ingresos disponible. El CRIA no busca capturar todas las dimensiones que inciden en las decisiones reproductivas, sino visibilizar los desequilibrios materiales que enfrenta la poblaci贸n a la hora de iniciar un proceso de crianza, y mostrar qui茅nes est谩n m谩s cerca o m谩s lejos de poder afrontarlo. 驴Por qu茅 hay cada vez menos nacimientos? 驴Qu茅 peso tienen los ingresos en esa decisi贸n? 驴Cu谩nto cuesta criar en Argentina hoy? 驴Qu茅 diferencias hay entre quienes cr铆an solas, en pareja o con ingresos muy distintos? Responder a estas preguntas es clave para entender c贸mo se reorganiza la reproducci贸n social en un contexto de crisis, desigualdad y cambios culturales. En este sentido, el an谩lisis del CRIA (Coeficiente de Reproducci贸n e Ingresos en Argentina) muestra que: * En marzo, criar a un/a beb茅 de menos de un a帽o cost贸 0,49 ingresos medios. * Para el ingreso promedio de las mujeres, esta proporci贸n fue de 0,58 mientras que para los varones fue de 0,41. * Para el 10% m谩s pobre de la sociedad, hicieron falta casi 4 ingresos medios para sostener y cuidar a un/a beb茅. * En cambio, para el 10% de mayores ingresos, este coeficiente ascendi贸 a apenas 0,16. * La relaci贸n entre crianza e ingresos entre los m谩s pobres equivale a 24 veces la misma relaci贸n entre los m谩s ricos. * Para una pareja heterosexual, hicieron falta 0,24 ingresos medios totales para criar un beb茅. Esto equivale 2,4 veces misma relaci贸n para una familia monomarental. 驴Por qu茅 el CRIA? La natalidad viene cayendo de forma sostenida en Argentina desde hace m谩s de una d茅cada. Este fen贸meno, que se aceler贸 tras la pandemia y se profundiza en el contexto actual, expresa una transformaci贸n profunda en las condiciones en que se reproduce la vida. No se trata simplemente de afirmar que 鈥渓a gente ya no quiere hijos鈥 鈥搇a ONU calcula que alrededor del 50% de los embarazos en el mundo no son buscados鈥 sino de analizar las condiciones en las cuales se imaginan y se planifican la reproducci贸n y la crianza. Las razones detr谩s de esta ca铆da son m煤ltiples y complejas. Por un lado, est谩n los factores econ贸micos: inestabilidad laboral, ca铆da de los ingresos reales, falta de acceso a vivienda, y dificultad creciente para sostener los costos directos e indirectos de la crianza. Por otro lado, hay razones sociales y culturales de igual peso: el aplazamiento de proyectos vitales, el acceso a niveles m谩s altos de educaci贸n, cambios en las estructuras familiares y una conciencia mayor sobre las condiciones necesarias para criar con dignidad. Tambi茅n se ampliaron los m谩rgenes de elecci贸n sobre la maternidad. El acceso a m茅todos anticonceptivos, la legalizaci贸n del aborto y los avances en los derechos sexuales y reproductivos permitieron que cada vez m谩s personas 鈥攜 especialmente las mujeres鈥 puedan decidir si, cu谩ndo y con qui茅n tener hijas e hijos. As铆, la maternidad dej贸 de ser un destino esperado y casi un铆voco para convertirse en una opci贸n m谩s, entre varias posibles e igualmente v谩lidas. A partir de 2014, la tendencia descendente de la fecundidad se volvi贸 m谩s marcada. Para 2022, la tasa de fecundidad en Argentina registr贸 una ca铆da del 34 % (Rofman et al., 2022), una de las m谩s significativas de la regi贸n en ese per铆odo. Este proceso se expresa tambi茅n en los modos de vida: en las 煤ltimas d茅cadas, creci贸 de forma sostenida la proporci贸n de hogares sin ni帽os, especialmente en zonas urbanas. Argentina atraviesa este proceso en un momento clave de su transici贸n demogr谩fica. Aunque la fecundidad comenz贸 a caer antes de 1935, fue en los 煤ltimos a帽os cuando la ca铆da se aceler贸 y consolid贸. La ONU proyecta que el pa铆s alcanzar谩 su bono demogr谩fico en 2034 y luego ingresar谩 en una etapa de envejecimiento cada vez m谩s pronunciada. Para 2040, la poblaci贸n de 60 a帽os y m谩s crecer谩 en m谩s de un 45 %, mientras que la poblaci贸n de 0 a 4 a帽os disminuir谩 tanto en t茅rminos absolutos como relativos. En este contexto, el debate p煤blico suele centrarse en los costos vinculados al envejecimiento 鈥攑ensiones, salud, atenci贸n a la dependencia鈥 mientras que poco se discute sobre las condiciones disponibles para quienes eligen 鈥搊 eval煤an鈥 criar. 驴Qu茅 significa criar hoy con ingresos insuficientes y sin redes p煤blicas de cuidado? 驴Cu谩les son las brechas entre quienes cr铆an solas y quienes comparten ingresos? Este informe propone una herramienta nueva para pensar esa dimensi贸n: el CRIA (Coeficiente de Reproducci贸n e Ingresos en Argentina). El CRIA relaciona el costo mensual estimado de la crianza con diferentes niveles de ingreso 鈥攑romedio general, ingreso por sexo, por composici贸n del hogar y por decil鈥 con el fin de aportar evidencia sobre en qu茅 condiciones econ贸micas se est谩 reproduciendo la vida en Argentina y con qu茅 desigualdades estructurales. 驴Qu茅 mide el CRIA? El Coeficiente de Reproducci贸n e Ingresos en Argentina (CRIA) mide la relaci贸n entre el costo de la crianza durante el primer a帽o de vida de una persona y los ingresos disponibles para sostenerlo. Es un indicador que busca capturar, en t茅rminos econ贸micos, cu谩nto pesa tener un/a hijo/a sobre los ingresos de las personas, y qu茅 tan accesible o costoso resulta ese proceso en el contexto socioecon贸mico argentino actual. A trav茅s de un cociente simple 鈥攅ntre el costo anual de la canasta de crianza para un/a ni帽o/a de 0 a 1 a帽o y distintos niveles de ingreso鈥 el CRIA permite observar con claridad cu谩nto representa la reproducci贸n biol贸gica y social en el presupuesto de los hogares. Si bien no pretende agotar todas las dimensiones que implica tener y cuidar a un/a hijo/a, funciona como un term贸metro del esfuerzo econ贸mico que supone esa decisi贸n en distintos grupos sociales y econ贸micos. El objetivo del indicador es poner en evidencia los factores materiales que inciden en las decisiones reproductivas en la Argentina, as铆 como visibilizar las desigualdades que existen en el acceso a la maternidad y a la crianza. El CRIA permite comparar situaciones entre varones y mujeres, entre hogares con distintos niveles de ingreso y entre diferentes combinaciones familiares (monomarentales, biparentales, etc.).
F贸rmula ? CRIA: Coeficiente de Reproducci贸n e Ingresos en el trimestre t. Expresa cu谩ntas veces el costo mensual de la Canasta de Crianza para ni帽xs de 0 a 1 a帽o equivale al ingreso medio mensual de las personas con ingresos. Un valor mayor a 1 indica que ese ingreso no alcanza para cubrir la canasta. ? CC0-,t: Valor mensual de la Canasta de Crianza para ni帽xs de 0 a 1 a帽o, calculado para el 煤ltimo mes del trimestre t. Incluye los gastos estimados de alimentaci贸n, vivienda, salud, transporte, cuidado y otros rubros necesarios para el desarrollo y bienestar de un/a ni帽o/a en esa franja etaria. ? ?t: Ingreso medio mensual de las personas con ingresos en el trimestre t. Se calcula promediando los ingresos individuales declarados, considerando 煤nicamente a quienes efectivamente perciben ingresos, para reflejar la capacidad adquisitiva real de quienes generan recursos. Decisiones metodol贸gicas Las principales decisiones metodol贸gicas est谩n vinculadas a los tres t茅rminos del CRIA: el numerador (canasta de crianza para ni帽os/as de hasta un a帽o), el denominador (ingreso medio de la poblaci贸n con ingresos) y el cociente (teniendo en cuenta que la canasta de crianza es mensual y el dato de ingresos es trimestral). 驴Por qu茅 tomamos estas decisiones? -Ingreso medio de la poblaci贸n con ingresos. El CRIA toma como denominador el ingreso medio de todas las personas que perciben ingresos (de cualquier tipo). Esta decisi贸n se basa en dos razones clave: 1) Incluir a personas sin ingresos no reflejar铆a adecuadamente las condiciones materiales reales en las que se eval煤an o atraviesan procesos reproductivos; 2) Limitarse al ingreso laboral principal dejar铆a afuera situaciones muy comunes: personas con pluriempleo, ingresos combinados (trabajo y transferencias estatales), o sostenes econ贸micos no laborales (como ayudas familiares o rentas). De esta forma, el ingreso medio utilizado en el CRIA se acerca m谩s a los recursos efectivamente disponibles para sostener una crianza. -Canasta de crianza para beb茅s de 0 a 1 a帽o. El CRIA se construye con el valor mensual de la canasta de crianza correspondiente al primer a帽o de vida. No se toma el promedio entre los diferentes grupos etarios que componen la canasta (0-1, 1-3, 4-5, 6-12) porque: 1) El foco del indicador est谩 puesto en los costos que se enfrentan al momento de tener un/a hijo/a, no en la crianza como proceso extendido. En otras palabras, lo que se busca emular es el c谩lculo que hacen las personas a la hora de decidir tener o no tener un hijo. 2) La etapa 0 a 1 a帽o es un proxy m谩s ajustado para pensar el inicio de la reproducci贸n, m谩s sencillo de replicar y comunicar.
-Relaci贸n entre ingreso trimestral y canasta mensual. Mientras que los ingresos se informan de forma trimestral (seg煤n las estad铆sticas oficiales), la canasta de crianza tiene un valor mensual. Para construir el CRIA, se toma la canasta del 煤ltimo mes de cada trimestre, con dos objetivos: 1) Capturar el efecto m谩s actualizado de la inflaci贸n sobre el costo de criar; 2) Usar una medici贸n estable y replicable que evita el ruido de promediar tres valores mensuales con diferentes bases de actualizaci贸n. Limitaciones y desaf铆os Como todo indicador, el CRIA presenta limitaciones que es importante tener en cuenta al interpretarlo. Por tratarse de un indicador compuesto, hereda ciertas debilidades tanto de la variable de ingresos como de la canasta de crianza, adem谩s de las propias de su construcci贸n metodol贸gica. En cuanto a los ingresos, el principal problema se relaciona con la calidad de los datos provistos por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Es frecuente la subdeclaraci贸n de ingresos por parte de los encuestados, motivada por desconfianza, temor a revelar informaci贸n o dificultades para recordar con exactitud sus percepciones. Esta subdeclaraci贸n tiende a ser mayor en sectores informales o en actividades con ingresos variables. Adem谩s, la EPH enfrenta dificultades para captar ingresos no regulares, como propinas o comisiones, y la no respuesta parcial o total a preguntas sobre ingresos tambi茅n afecta la precisi贸n de los datos. En contextos de alta inflaci贸n y cambios econ贸micos, la variabilidad salarial puede complicar la comparaci贸n entre per铆odos. Estas limitaciones son relevantes porque afectan la precisi贸n del CRIA y otros indicadores basados en la EPH. Respecto a la Canasta de Crianza, existen dos cr铆ticas principales. En primer lugar, el componente vinculado a los cuidados est谩 calculado a partir de la paritaria nacional de trabajo en casas particulares, que no se actualiza desde hace varios meses. Esto provoca que los costos de cuidados crezcan por debajo de la inflaci贸n, sin reflejar los incrementos reales del mercado y de otros gastos relacionados. En segundo lugar, al tratarse de una canasta est谩ndar basada en convenios colectivos y la canasta b谩sica total, no se adapta a realidades espec铆ficas, especialmente de sectores vulnerables como ni帽os y ni帽as con discapacidades u otras condiciones que requieren gastos adicionales tanto en bienes y servicios como en cuidados especializados. Finalmente, el CRIA tiene limitaciones propias de su dise帽o. Al centrarse 煤nicamente en el costo de crianza de un ni帽o o ni帽a menor de un a帽o, omite las variaciones que implican otras etapas de la crianza y el cuidado. Asimismo, esta decisi贸n asocia la reproducci贸n y la crianza al nacimiento biol贸gico, sin considerar otras formas de crianza, como la adopci贸n o la crianza extendida en contextos familiares diversos. Por 煤ltimo, el CRIA es el cociente entre un valor calculado para Gran Buenos Aires (la Canasta de Crianza) sobre un valor nacional (el ingreso promedio). Sin embargo, dado que la Canasta de Crianza solo se alcula para GBA, no hay alternativas disponibles para un indicador de este tipo en el corto plazo. A pesar de estas limitaciones, el CRIA es un instrumento en desarrollo. La intenci贸n es que, a lo largo de los informes trimestrales, se profundice en las distintas dimensiones y realidades de la crianza, incorporando ajustes y mejoras que permitan capturar mejor la complejidad de este proceso. 驴Para qu茅 sirve el CRIA? El CRIA (Coeficiente de Reproducci贸n sobre Ingresos en Argentina) cumple un doble prop贸sito que lo vuelve una herramienta integral para abordar el costo de la crianza. Por un lado, funciona como un indicador sint茅tico que permite leer la realidad econ贸mica de las personas en relaci贸n con el costo de criar hijos e hijas. Al relacionar el gasto estimado en la crianza durante el primer a帽o con los ingresos individuales promedio, el CRIA abre preguntas clave sobre la asequibilidad de la crianza, las desigualdades socioecon贸micas y territoriales, y el impacto de la econom铆a en las decisiones demogr谩ficas. Su uso peri贸dico permite monitorear tendencias y fundamentar pol铆ticas p煤blicas que busquen aliviar la carga econ贸mica del cuidado, aportando evidencia para dise帽ar asignaciones individuales, licencias parentales, subsidios y otras medidas de protecci贸n social. Por otro lado, el CRIA tiene un uso operativo espec铆fico y de alto impacto social: puede funcionar como referencia objetiva en juicios por cuota alimentaria. Su valor actualizado y respaldado metodol贸gicamente puede proveer a jueces, abogados y mediadores una base concreta para fijar cuotas que reflejen el costo real de la crianza, reduciendo la discrecionalidad y ajustando los montos a contextos de alta inflaci贸n. En este sentido, el CRIA se convierte en una herramienta pr谩ctica que contribuye a garantizar derechos, asegurar un est谩ndar justo y evitar atrasos en las prestaciones destinadas a sostener a ni帽os y ni帽as. Este uso operativo complementa a la Canasta de Crianza: mientras que ella mide el costo de criar desde el lado de la "demanda" 鈥攅s decir, las necesidades b谩sicas de los ni帽os y ni帽as en t茅rminos de bienes, servicios y cuidados鈥, el CRIA aporta informaci贸n desde la "oferta", es decir, desde la capacidad econ贸mica real del alimentante, como la entienden jueces y abogados en los procesos judiciales. As铆, ambos indicadores se complementan para brindar par谩metros objetivos y actualizados que facilitan la toma de decisiones respecto al monto de la cuota u obligaci贸n alimentaria, reduciendo arbitrariedades y consolidando criterios en base a evidencia. El CRIA en acci贸n: diversidad y desigualdad ante la reproducci贸n y la crianza M谩s all谩 del promedio general, el CRIA permite observar c贸mo var铆a el esfuerzo econ贸mico de criar seg煤n sexo, nivel de ingresos, composici贸n familiar y edad de los ni帽os, entre otras posibles variables relevantes. Estas diferencias no s贸lo reflejan desigualdades preexistentes en la distribuci贸n de los recursos, sino que tambi茅n muestran c贸mo esas brechas inciden en la posibilidad real de iniciar y sostener una crianza. Sexo En el primer trimestre de 2025, criar a un beb茅 de menos de un a帽o represent贸 el 57,6 % del ingreso medio de las mujeres y el 40,8 % del ingreso medio de los varones. Es decir que, por cada peso que ganaron, las mujeres destinaron casi 60 centavos a criar, mientras que los varones destinaron 40. Esta brecha es persistente a lo largo del tiempo y se explica por la desigualdad de ingresos entre varones y mujeres. En otras palabras, la diferencia no est谩 en el costo de la canasta 鈥攓ue es el mismo para todos鈥, sino en los ingresos: los varones ganan m谩s y, por lo tanto, la crianza ocupa un espacio menor en su presupuesto. Cuando los ingresos son m谩s bajos, el peso de la crianza aumenta y por eso la brecha entre mujeres y varones se ensancha. Por este motivo, entre el 4to trimestre de 2023 y el 2do trimestre de 2024, las brechas de g茅nero en el CRIA fueron mayores: producto de la devaluaci贸n de diciembre de 2023, los salarios de las mujeres sufrieron un desfasaje respecto al salario de los varones. As铆, en el primer trimestre de 2024 la brecha fue la m谩s alta de toda la serie. Una cuesti贸n importante a tener en cuenta al analizar la serie hist贸rica: as铆 como el denominador del CRIA covar铆a en relaci贸n a los ingresos, es importante tener en cuenta que el numerador covar铆a con la Canasta de Crianza, que se compone en casi un 70% por el salario horario de las trabajadoras de casa particular: dado que este sector no percibi贸 aumentos significativos a lo largo del 煤ltimo a帽o, la presi贸n de la Canasta de Crianza sobre el ingreso es menor y, como se mencion贸 en el apartado metodol贸gico, registra niveles de aumento por debajo del IPC. Esto explica el declive sostenido, sobre todo en el 煤ltimo a帽o. Deciles de ingreso En el 10 % m谩s pobre de la poblaci贸n 鈥攅l primer decil鈥, criar a un beb茅 de menos de un a帽o exige 3,89 ingresos medios de ese grupo. Es decir, casi cuatro veces lo que una persona promedio de ese decil gana en un mes. A partir de all铆, el CRIA dibuja una curva descendente n铆tida: cuanto menor es el ingreso, mayor es el esfuerzo econ贸mico para criar, y esa distancia entre extremos refleja desigualdades estructurales que condicionan la decisi贸n misma de tener hijos. A medida que se sube en la escala de ingresos, el peso de la crianza se reduce: baja a 1,59 ingresos en el decil 2, a 1,25 en el decil 3 y se iguala al ingreso mensual en el decil 4 (1,00). A partir del decil 5, el costo relativo queda por debajo de 1: 0,81 en el 5, 0,64 en el 6 y 0,52 en el 7. En los tramos m谩s altos, la brecha se vuelve m谩s marcada: 0,42 en el decil 8, 0,32 en el 9 y apenas 0,16 en el 10 % m谩s rico. Esto significa que la relaci贸n entre crianza e ingresos equivale a 24 veces la misma relaci贸n en los ingresos de los hogares m谩s pobres que en los m谩s ricos. Por sexo, las diferencias dentro de cada decil son en general peque帽as, salvo en el primero. All铆, el CRIA de las mujeres es levemente menor porque los pocos varones presentes tienen ingresos a煤n m谩s bajos que ellas, que representan casi el 70% de este grupo. Tipo de familia El CRIA tambi茅n revela diferencias significativas seg煤n la composici贸n familiar, que inciden directamente en el peso econ贸mico de la crianza. En el primer trimestre de 2025, los hogares monomarentales encabezados por mujeres enfrentaron la carga relativa m谩s alta: criar a un beb茅 demand贸 el 57,9% del ingreso medio disponible de las mujeres, casi el doble que en hogares con pareja var贸n-mujer (24,0%). Esta brecha evidencia las dificultades adicionales que enfrentan las madres solas, quienes no solo tienen menores ingresos promedio, sino que tambi茅n deben asumir solas los costos y responsabilidades de la crianza. Los hogares monoparentales encabezados por varones tambi茅n enfrentan una carga elevada (41,0%), aunque menor que la de las mujeres monomarentales. Por su parte, las parejas del mismo sexo muestran un CRIA intermedio: los hogares con dos mujeres destinan un 28,9% de sus ingresos a la crianza, mientras que los de dos varones, un 20,5%. Estas diferencias reflejan no solo variaciones en los ingresos promedio, sino tambi茅n desigualdades en el acceso a redes de apoyo, en la distribuci贸n de las tareas de cuidado y en la estabilidad laboral y econ贸mica de cada tipo de hogar. En particular, la elevada presi贸n econ贸mica sobre los hogares monomarentales resalta la necesidad de pol铆ticas p煤blicas que reconozcan y acompa帽en esta realidad, para garantizar que todas las familias puedan sostener una crianza digna y sostenible. Edad de los ni帽os/as Aunque el CRIA se calcula con base en la canasta de crianza para beb茅s de 0 a 1 a帽o, aplicarlo a diferentes grupos etarios muestra c贸mo cambia la presi贸n econ贸mica seg煤n la etapa de crecimiento. En el primer trimestre de 2025, el CRIA fue 0,478 para beb茅s, 0,568 para ni帽os/as de 1 a 3 a帽os, 0,477 para 4 a 5 a帽os y alcanz贸 0,600 para ni帽os/as de 6 a 12 a帽os, con un promedio general de 0,531. Estos n煤meros sugieren que, si bien el primer a帽o implica gastos iniciales importantes, las necesidades de cuidado y consumo no se reducen necesariamente con la edad, e incluso pueden aumentar en ciertos momentos, como durante la ni帽ez temprana y escolar. Sin embargo, esta interpretaci贸n debe matizarse por un factor clave: como se marc贸 anteriormente, casi el 70 % del costo de la canasta de crianza corresponde al salario horario de trabajadoras de casas particulares, un sector con ingresos estancados o deprimidos durante el 煤ltimo a帽o. Esto implica que, aunque en condiciones normales un mayor tiempo de cuidado deber铆a elevar el costo relativo de la crianza en ni帽os mayores, la falta de aumentos salariales en este sector reduce artificialmente ese efecto. En consecuencia, el CRIA puede subestimar el incremento real en los costos de crianza asociados a mayores demandas de cuidado, al estar distorsionado por la precariedad salarial de las trabajadoras dom茅sticas. Esta situaci贸n agrega una dimensi贸n m谩s a las desigualdades que enfrentan las familias para sostener la crianza en el tiempo. Conclusiones El CRIA evidencia la enorme dificultad que supone hoy criar en Argentina. No se trata de una cuesti贸n de voluntad o 鈥渆lecci贸n libre鈥 en abstracto, sino de una decisi贸n que est谩 atravesada por condiciones materiales adversas. Para una gran parte de la poblaci贸n, y en particular para los segmentos m谩s pobres, el costo econ贸mico de la crianza representa un esfuerzo pr谩cticamente insostenible, que en muchos casos supera varias veces el ingreso mensual disponible. La ca铆da sostenida de la natalidad no es un misterio que pueda explicarse con discursos simplistas ni con falacias que atribuyen la baja fecundidad a supuestos 鈥渆xcesos鈥 del feminismo o a la supuesta 鈥減ereza鈥 de quienes no quieren tener hijos. Es una consecuencia de una pol铆tica econ贸mica que avanza contra el salario y el tiempo de las personas, precariza el trabajo, aumenta la desigualdad de ingresos y atenta contra la provisi贸n de cuidados. En lugar de buscar culpables ideol贸gicos, el debate p煤blico deber铆a enfocarse en construir respuestas reales: mejorar los ingresos, expandir los derechos laborales y sociales, desarrollar un sistema integral de cuidado y garantizar que criar no sea un privilegio de pocos, sino un derecho al alcance de todos. El CRIA se presenta como una herramienta valiosa para medir ese esfuerzo econ贸mico y para visibilizar las desigualdades estructurales que condicionan las decisiones reproductivas. Como term贸metro de la capacidad econ贸mica para criar, aporta datos concretos para fundamentar pol铆ticas p煤blicas orientadas a aliviar la carga material sobre las familias y tambi茅n para mejorar la justicia en el 谩mbito judicial, especialmente en la fijaci贸n de cuotas alimentarias ajustadas a la realidad. En un contexto de profundizaci贸n de la desigualdad y crisis social, el CRIA no solo aporta evidencia para comprender la reproducci贸n social en Argentina, sino que se convierte en un insumo central para orientar pol铆ticas que garanticen el derecho a criar con dignidad. Ignorar esta realidad o desviar la atenci贸n hacia falsos debates ideol贸gicos es condenar a las familias a la precariedad y profundizar la crisis demogr谩fica y social de la Argentina. Referencias Instituto Nacional de Estad铆stica y Censos. (2020鈥2025). Base individual y hogar. Total aglomerados EPH y por aglomerado; total interior; y aglomerados de m谩s y menos de 500.000 habitantes [Base de datos]. Incluye series trimestrales: 2020 (T1鈥揟4), 2021 (T1鈥揟4), 2022 (T1鈥揟4), 2023 (T1鈥揟4), 2024 (T1鈥揟4) y 2025 (T1). https://www.indec.gob.ar/indec/web/Institucional-Indec-BasesDeDatos-1 Instituto Nacional de Estad铆stica y Censos. (2025). Canasta de crianza, por tramo de edad. Enero 2020-junio 2025 [Base de datos]. https://www.indec.gob.ar/indec/web/Nivel4-Tema-4-43-17 Link del informe: |