02-05-2024
China insiste con lo científico, pero Argentina quiere investigar
Más allá de los intentos de suavizar el vínculo con China, la inspección a la estación espacial en Neuquén se realizará esta semana. 
La cuestión por la llamada Estación de Observación Espacial que China posee en la provincia argentina de Neuquén podría generar en estos días una nueva rispidez entre ambos países. Más allá de la inicial bajada de tono de Argentina que solo sería una visita, el sitio de investigación El Archivo confirma que será una inspección de parte de los gobiernos nacional y provincial.
El medio le ha dedicado numerosas notas en la cual se ha referido a la polémica instalada por el funcionamiento, en el paraje Bajada del Agrio en la provincia argentina de Neuquén, de una estación de observación de espacio profundo de China. La colocación de una enorme antena y una instalación a la que solo accede persona l chino genera sospechas, si bien existe un convenio firmado por la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y China Satellite Launch and Tracking Control General (CLTC). La cuestión puntual es que CLTC es una agencia que depende del Departamento General de Armamento y de la Comisión Central Militar del Ejército chino, es decir depende de sus Fuerzas Armadas. Por otra parte, en el convenio no se invalida la utilización militar de las instalaciones, además de incluir un artículo de confidencialidad de equipos, actividades y programas.

La tecnología dual de China
El tema siempre recurrente tiene que ver con lo que se denomina tecnología dual y el uso que China ha dado de esto en otros lugares. Por un lado, la tecnología dual entendida como aquellos dispositivos o instalaciones que, si bien se utilizan para determinados fines, no están exentos de ser utilizados para otros no declarados. Por otro lado, no sería la primera vez por parte de los asiáticos, de comportarse así, en temas que involucran la seguridad de los países que denunciaron a China por espionaje bajo la forma de globos de estudios climáticos.
En su momento, el mundo se vio sorprendido por la aparición en espacio aéreo de EE. UU. de un objeto primero no identificado y luego reivindicado por China como de su propiedad y de ser parte de un experimento científico. No obstante, el gobierno de Biden desconfió de estas explicaciones y mandó a derribar el globo en cuestión. Si bien China invocó la excusa que se trataba de un aparato de medición meteorológica que solo se desvió de su curso en normal, en EEUU sospechan ya que los primeros peritajes sobre el objeto derribado apuntan a que el equipo a bordo era "incoherente" con lo que habría en uno meteorológico, ya que disponía de "múltiples antenas para incluir un conjunto capaz de recoger y geolocalizar comunicaciones" y que los paneles solares eran lo suficientemente grandes como para alimentar ese tipo de actividad de inteligencia.

Las críticas de EE. UU.
Volviendo al tema en Neuquén, EE. UU. ha manifestado de diversas formas y a través de distintos oradores su preocupación. Hace 2 años, la entonces flamante jefa del Comando Sur de los Estados Unidos general Laura Richardson, que estuvo nuevamente de visita en Argentina, había explicado sus dudas respecto al uso que se le da a la estación, cuando el acceso está cerrado a ciudadanos argentinos, salvo visitas planificadas. También remarcó el hecho de que sea manejado por una empresa estatal que depende de autoridades militares. Hace un año, la congresista María Elvira Salazar había realizado varias menciones al tema en diversas reuniones en el Capitolio, incluso llegando a interpelar al propio Secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken. Hace unas semanas, el embajador Stanley es el que hace hincapié en el tema afirmando que: "me sorprende que la Argentina permita que las Fuerzas Armadas chinas operen en Neuquén, en secreto, haciendo quién sabe qué. Tengo entendido que se trata de soldados del ejército chino que operan este telescopio espacial, no sé lo que hacen, creo que los argentinos tampoco lo saben, y deberían entender por qué los chinos están desplegados allí”. En su momento, expertos en seguridad de los EE. UU., han explicado que las antenas y otros equipos que se utilizan de respaldo en misiones espaciales, similares a las que tienen los chinos en la Patagonia, posiblemente aumenten la capacidad de China para recabar información. “Una antena gigante es como una enorme aspiradora, succiona señales, información, todo tipo de cosas”.

La postura de Neuquén
En todos estos años, salvo al momento inicial del armado de la instalación, la provincia de Neuquén, distrito donde se encuentra la misma, no había sentado postura al respecto, fue entonces hace unos 10 días cuando el gobernador Rolando Figueroa, respaldó la postura del gobierno nacional y comunicó que "con relación a la Estación Espacial ubicada en el paraje Quintuco -en proximidades de Bajada del Agrio- que por estos días es motivo de debates en medios regionales y nacionales, el Gobierno de la Provincia del Neuquén sostiene que es imprescindible garantizar la seguridad jurídica en el cumplimiento de los contratos y acuerdos establecidos. También que debe asegurarse la máxima transparencia en el desarrollo de las actividades que son objeto de dichos acuerdos". 
La participación de la provincia no es dato menor porque Neuquén es parte y porque es dueña del terreno que cedió por 50 años al gobierno de China para esa base que en abril de 2015 inició las tareas de montaje de la antena y comenzó a funcionar en 2017.
La cuestión que pareció inicialmente una concesión a EE. UU. por la postura de acercamiento de Milei y otros ribetes, al concluirse con la visita esta semana una medida que apunta a monitorear que la tecnología dual que allí funciona no va en contra de la defensa de la soberanía argentina y los parámetros de seguridad.

Así lo consignó el sitio de periodismo de investigación www.elarchivo.com